Encuentran carbono en África
Por Henry Fountain
The New York Times, México, 28 enero 2017
Científicos han trazado el mapa de lo que dicen es la turbera más grande en los trópicos, que se extiende sobre unos 140 mil kilómetros cuadrados en la Cuenca del Congo en África Central.
La turba, que consiste de vegetación de lenta descomposición en bosques pantanosos, se ha ido acumulando durante más de 10 mil años. Como en todas las turberas, la vegetación es un almacén natural de carbono tomado de la atmósfera -en este caso, unos 30 mil millones de toneladas de carbono, o casi el equivalente al carbono en dos décadas de emisiones de combustibles fósiles en Estados Unidos.
"Es increíble para mí que en el 2017 podamos hacer este tipo de descubrimientos", dijo Simon Lewis, profesor de la Universidad de Leeds en Inglaterra.
Lewis y sus colegas descubrieron por primera vez las turberas hace varios años, al trabajar sobre la corazonada de que en los humedales conocidos como Cuvette Centrale, que abarcan la frontera de la República del Congo y la República Democrática del Congo, encontrarían turba en capas debajo de los pantanos.
El estudio actual utilizó imágenes satelitales y análisis para determinar la extensión de la turba. El trabajo de campo en los humedales reveló que la profundidad de la turba era de hasta 6 metros, permitiendo un cálculo de la cantidad de carbono almacenado.
La turba cubre sólo el 3 por ciento de la superficie de la Tierra, pero como almacena carbono durante mucho tiempo, contiene tanto carbono como todas las plantas y árboles del mundo, y casi tanto como la atmósfera.
La mayoría de las turberas están en regiones del norte, como Alaska, Canadá y Rusia. Pero las turberas tropicales, en particular, son muy vulnerables a los cambios en el uso del suelo y a un clima más cálido, lo que puede hacer que la turba se seque y se descomponga rápidamente, lo que liberaría el carbono de vuelta a la atmósfera.
Vastos tramos de turba en Indonesia, por ejemplo, han sido drenados para la producción de palma de aceite, provocando incendios y liberación rápida de carbono. En el otoño del 2015, los incendios de turbas en Indonesia liberaron más carbono al día que la Unión Europea.
Las turberas de la Cuenca del Congo están en un área relativamente inaccesible y en gran medida permanecen intactas. Pero científicos y ambientalistas temen que los mismos tipos de presiones que afectan a Indonesia podrían, con el tiempo, afectar a las turberas de Cuvette Centrale.
Emma J. Stokes, que dirige el programa de África Central para la Sociedad de Conservación de Vida Silvestre, dijo que era crucial proteger las turberas, ya que los bosques pantanosos que los cubren son hogar de muchos animales, incluyendo algunas de las más altas densidades de gorilas de tierras bajas.
La inaccesibilidad de la zona fue "una de las razones por las que ha podido tener protecciones naturales a lo largo de los años", dijo Stokes.